Desde ese momento, Rachel se distanció de su padre como la señora Sexton jamás lo había hecho. El senador apenas pareció darse cuenta. De repente estaba muy ocupado utilizando la reciente desgracia que había sacudido a su esposa a fin de empezar a cortejar la nominación de su partido para presentarse como candidato a presidente. El voto compasivo tampoco debía despreciarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario